El mundo viene cambiado a pasos agigantados en las últimas décadas y así mismo los negocios que día a día buscan formas de ser más globales, de cubrir gran parte del mundo y llevar a diferentes destinos sus productos y servicios.
Es así como las compañías llegan a tener equipos de trabajo multiculturales y de gran diversidad a todo nivel, lo cual genera grandes beneficios, pero también grandes retos. Uno de los mayores es nuestra adaptación y la de nuestras familias, ya que cambiar de país implica una serie de emociones diversas que van desde el miedo o la tristeza hasta la alegría, la curiosidad y la realización personal y profesional.
Para esta adaptación es muy importante entender que las personas tenemos una cultura visible que es dada por nuestro idioma, costumbre, tradiciones y una cultura invisible que es dada por nuestras percepciones, creencias y valores. Aprender a interpretar estas culturas es lo que garantizará el éxito y la satisfacción al momento de tener un traslado y facilitará enormemente tu adaptación y la de tu familia.
Para enfrentar esta gran etapa te sugerimos que aprendas lo que más puedas sobre esta nueva cultura, reconoce que es tan valiosa como la tuya, tomate el tiempo para reflexionar sobre esta nueva situación, en que puedes coincidir y en que podrías diferir. A medida que aprendes sobre estas similitudes o diferencias mejorara tu capacidad de relacionarte con diferentes culturas.
Sin embargo, ten presente que cruzar una frontera cultural requiere de un gran aprendizaje emocional más que de un aprendizaje intelectual, pero sobre todo que es una gran aventura que requerirá que desarrolles nuevas habilidades.
En LARM tras años de acompañamiento a las familias hemos aprendido a conocer y entender esta diversidad de culturas, por lo que te invitamos a que nos escribas aquí para contarte cómo apoyarte en este proceso de adaptación en tu nuevo país.
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